Consideraciones para embarque de ganado
Dra. María Pía Sánchez Barberousse
MARFRIG
Dra. Valentina Herrera Costabel
Plan Agropecuario
El embarque y transporte de ganado son prácticas que generan estrés en los animales por diferentes motivos. Este estrés se traduce en alteraciones en el bienestar de los animales y en la calidad de carne, lo que termina produciendo grandes pérdidas económicas a nivel de industria. En este artículo vamos a repasar algunas medidas de cómo mitigar las pérdidas económicas y productivas ocasionadas por estas prácticas.
A nivel mundial se exige cada vez más que los animales destinados a consumo reciban un trato adecuado a lo largo de toda la cadena productiva. Debemos contemplar este criterio para adecuarnos a las exigencias de los consumidores y cumplir con los requerimientos del comercio internacional para acceder a nuevos mercados y mantener los que ya tenemos.
En nuestro país, tenemos un gran desafío por delante con el transporte del ganado. Esto es debido al estado de las rutas, la falta de conocimiento del personal responsable del transporte y las largas distancias que debe recorrer el ganado estando de pie hasta llegar a destino.
De todos modos, el embarque es una práctica que de por sí genera estrés en el ganado. Contando con gente capacitada, y teniendo conocimiento de cómo se debería realizar estos procedimientos tanto antes, durante y después de cargar animales, se podría colaborar en mitigar los efectos negativos causante de estas prácticas tan necesarias.
Los malos manejos en estos momentos pueden repercutir en malos resultados de la calidad de la canal, como hematomas y/o cortes oscuros representando grandes pérdidas económicas y productivas tanto para el productor como para la industria cárnica.
El objetivo de este artículo es repasar las principales recomendaciones para el buen manejo, desde el momento en que se lleva el ganado a las mangas y se embarca.
A su vez, mencionaremos que repercusiones existen a nivel de planta por malos manejos.
Manejo previo al embarque
En esta época del año donde las temperaturas ambientales son altas se debe tener especial precaución al momento de planificar un embarque.
En primer lugar, planificar el embarque durante las horas del día en que la temperatura no sea muy elevada para mitigar los efectos producidos por el estrés calórico. Existe una herramienta, que está al alcance de los productores que nos permite predecir con siete días de anticipación el impacto de la temperatura y humedad en los animales. Se puede acceder a esta herramienta a través de la plataforma Portal INIA Previsión de estrés calórico en bovinos. Es importante contar con sombra y agua ya que ayuda a contrarrestar los efectos negativos del estrés calórico, principalmente si van a permanecer por un largo periodo en los corrales.
Teniendo en cuenta lo mencionado anteriormente, cuando juntamos animales debemos hacerlo con tranquilidad, respetando su paso y evitando gritos.
Si estos tienen que recorrer largas distancias hacia el embarcadero, se recomienda juntarlos el día previo al embarque, o traerlos con anticipación para que se recuperen previo subir al camión.
Es recomendable que días antes del embarque estén los lotes de animales ya formados, de esta forma se podrán evitar peleas y golpes durante el embarque y transporte.
Una vez el ganado encerrado en las mangas, no usar picanas eléctricas, palos, ni perros ya que esto genera mucho estrés al ganado.
Manejo durante el embarque
Siempre antes de realizar algún trabajo con animales en las mangas, debemos asegurarnos de que contamos con instalaciones adecuadas y en buen estado. En este caso, la rampa de embarque debe ser de paredes sólidas, tener una correcta inclinación y piso antideslizante.
Con el objetivo de minimizar el estrés que se pueda generar en estas etapas previas a la faena, se recomienda realizar el movimiento de los animales de a pie, evitando el uso de perros. Utilizar banderas como herramienta principal para guiar a los animales, moviéndolos en subgrupos y sin sobrecargar el huevo.
Se debe cargar únicamente los animales que sabemos con seguridad que llegaran de pie a destino. El número de animales a embarcar es un punto muy importante que debemos siempre respetar ya que, si quedan muy apretados, los animales corren mayor riesgo de sufrir caídas y pisadas de otros animales. Cuando son pocos animales se recomienda utilizar separadores con el fin de achicar el espacio de la jaula para que no queden muy flojos y puedan caer con mayor facilidad.
Para determinar el número de animales a cargar, los transportistas de ganado se rigen por tablas de carga de la Asociación Uruguaya de Transportistas de Hacienda (tabla 1), donde indican según la categoría y la dimensión de la jaula, cuantos animales podrán ser transportados allí.
Pérdidas ocasionadas por malos manejos
A nivel nacional, las problemáticas que encabezan las mayores pérdidas económicas de la cadena cárnica se deben, en un 95%, a problemas de manejo y bienestar animal. Se estima una pérdida aproximada de 30 millones de pesos debido a hematomas, abscesos y cortes oscuros principalmente (Cuarta auditoría de calidad de la cadena cárnica del Uruguay. Vacunos y Ovinos. (Tabla 2).
Estas pérdidas impactan directamente al productor por remoción de hematomas y abscesos, pero también a la industria por menores rendimientos, menor calidad de la carne y menor valor comercial de los productos. El aumento en la aparición de abscesos a causa de malas prácticas de administración de inyectables, sumado a la falta de registros en el uso de medicamentos podría suponer un grave riesgo a nivel país por la posibilidad de detección de residuos en carne.
Comentario final
Confiamos firmemente que, para lograr mejores resultados en toda la cadena, es necesaria la capacitación del personal implicado en el manejo de los animales, desde personal de campo, transportistas y personal de planta frigorífica. Para esto, proponemos capacitaciones teóricas y prácticas anuales en diferentes zonas del país con el objetivo de que todas las personas puedan tener acceso a esta información.